Majestuosa finca histórica que data del siglo XII, situada en un entorno de ensueño que combina elegancia y naturaleza en completa armonía. La propiedad principal ofrece 700 m² construidos, rodeada de una impresionante parcela de 350.000 m², de los cuales 110.000 m² están vallados, proporcionando la máxima privacidad. La masía ha sido completamente restaurada, y su estado actual es impecable, reflejo de un esmerado trabajo de rehabilitación que conserva su encanto original.
Distribuida en dos niveles, la planta baja cuenta con un amplio y luminoso hall de entrada que da paso a un acogedor salón con chimenea, un elegante comedor con su propia chimenea, una cocina independiente equipada y una práctica sala de máquinas. También en esta planta hay una lujosa suite con baño completo y una sala polivalente.
La planta superior alberga un gran salón que también puede utilizarse como espacio multifuncional, junto con cinco espaciosas habitaciones dobles, todas ellas muy luminosas, con excepcionales vistas al entorno natural y cuatro baños completos.
Adosado al cortijo, hay un piso independiente perfecto para invitados. En la planta baja hay un garaje, un taller y un cobertizo, mientras que en la primera planta, a la que se puede acceder de forma independiente, hay un dormitorio con baño privado y una gran terraza con vistas espectaculares.
La finca está rodeada de un frondoso jardín con una piscina de diseño, así como un establo de madera de 215 m² con tres boxes para caballos, trastero, vestuario y duchas exteriores. También dispone de un espacio adicional independiente con dormitorio, cocina y baño.
Equipada con todas las comodidades modernas, la propiedad cuenta con acabados de alta calidad, aire acondicionado, calefacción, sistema de alarma perimetral y estanque propio. Estratégicamente situada entre la playa y el centro de Girona, ofrece excelentes comunicaciones, haciendo de esta finca una oportunidad única para aquellos que buscan una propiedad de lujo en un entorno natural incomparable.